El desfile comenzó con la voz de la artista británica Alison Moyet , situada en el centro de la sala y acompañada de una orquesta de 32 miembros. En el front row, numerosas celébrities no se quisieron perder el desfile. Pudimos ver a Kate Moss sentada al lado de Cara Delevingne, St. Vincent, Sienna Miller, Suki Waterhouse, entre otros muchos.
La colección estaba compuesta de vestidos románticos, prendas con toques militares como insignias, botones o pasamanería dorada y vestidos largos de seda combinados con capas negras que le daban un toque más desenfadado a lo que nos tiene acostumbrado el diseñador. No nos podemos olvidar de la reinvención de su pieza icónica, el trench, que este temporada utiliza el tejido de encaje y el impermable para re-diseñarlos.
Al igual que arrasaron las capas, esta vez Bailey apuesta por una mochila impermeable de naylon como complemento «it» de la temporada.